San Juan Yucuita es un pintoresco pueblo ubicado en la región de Valles Centrales del estado de Oaxaca en México. Con una historia que se remonta al siglo XIII, este lugar es rico en cultura, tradición y patrimonio. Pero si hay algo que realmente destaca de San Juan Yucuita es su gastronomía, una mezcla de sabores ancestrales y modernos que te sorprenderá en cada bocado.
Para los amantes de la gastronomía, este lugar es un paraíso en la Tierra. Sus platillos tienen ingredientes que son autóctonos de la región, convirtiéndolos en únicos y distintivos. Además, la cocina de San Juan Yucuita es una mezcla de influencias prehispánicas y españolas, lo que le da un toque especial a cada platillo. Para ayudarte a descubrir los sabores de San Juan Yucuita, a continuación te dejamos una lista de los platillos que no puedes dejar de probar y dónde encontrarlos.
1. Tlayudas: Si hay un platillo que es una referencia imprescindible de la cocina oaxaqueña, ese son las tlayudas. Una tlayuda es una tortilla grande y crujiente que se asa en un comal y se rellena con distintos ingredientes, como frijoles, queso, tasajo, chorizo y cecina. Una de las mejores opciones para probarlas es en el restaurante «El Paraíso», donde además de las tradicionales, ofrecen algunas variantes como la tlayuda de chapulines.
2. Quesillo: El queso oaxaqueño, conocido como quesillo, es otro de los ingredientes que no pueden faltar en cualquier platillo típico de la región. Se trata de un queso con una textura suave y elástica, similar a la del queso mozzarella, que se utiliza para preparar muchos platillos, como las empanadas de amarillo, el mole de olla o las memelas. En la plaza central del pueblo hay puestos que venden quesillo recién hecho y esa es una excelente opción para probarlo.
3. Pescado a la talla: San Juan Yucuita es un pueblo que se encuentra a una hora de la costa del Pacífico, por lo que los platillos de pescado son una de las especialidades de la región. El pescado a la talla es uno de los platillos más representativos, preparado con una mezcla de chiles y especias que le da un sabor intenso y picante. En el restaurante «La Hacienda de Yucuita» sirven uno de los mejores pescados a la talla de toda la zona.
4. Mole negro: El mole es uno de los platillos mexicanos más conocidos a nivel internacional, pero el mole negro de San Juan Yucuita es una delicia que no puedes perderte. Se trata de un mole hecho a base de chiles, especias y chocolate que se sirve con pollo o carne. La receta es un secreto muy bien guardado por las familias locales y no todos los restaurantes lo preparan bien, pero en «La Marquesa» y «La Matilde» seguro que podrás probar uno espectacular.
5. Horchata: Si bien no es un platillo, la horchata es una bebida que no puedes dejar de probar. Es una bebida dulce hecha a base de arroz, canela y agua, que se bebe fría y es perfecta para refrescarte en los días de calor. En el mercado local puedes encontrar varios puestos que la ofrecen, pero nuestros favoritos son los de «Las Cazuelas de la Abuela» y «La Cosecha».
Además de disfrutar de la comida en San Juan Yucuita, existen varias atracciones turísticas que podrás visitar. Una de las opciones más populares es el templo de San Juan Bautista, un templo católico construido en el siglo XVI, que cuenta con varios elementos de arte barroco. Otro lugar que vale la pena visitar es el panteón, ubicado en la cima de una colina, desde donde se tiene una vista espectacular del pueblo y los alrededores.
Finalmente, es importante tener en cuenta que San Juan Yucuita es un lugar donde la vida transcurre con calma y tranquilidad. No es un destino turístico masivo, por lo que encontrarás una atmósfera relajada y pacífica, ideal para desconectar de la rutina. Pero, al mismo tiempo, esto significa que la infraestructura turística no es la más desarrollada, por lo que recomendamos llevar contigo lo necesario para tu estancia y no esperar grandes lujos.
San Juan Yucuita es un destino que no puedes dejar de visitar si eres un amante de la gastronomía y te encanta explorar lugares no tan conocidos. Aquí, no solo podrás degustar platillos con sabores únicos que no encontrarás en otros lugares, sino que también podrás disfrutar de la tranquilidad y belleza de un pueblo que te hará sentir como en casa. ¡No te lo pierdas!