Descubre los mejores lugares para comer en Purús, Perú: Consejos y recomendaciones ordenados por importancia
Los viajes a Perú ofrecen mucho más que las Ruinas de Machu Picchu y los mercados de Cusco. La selva amazónica del país es uno de sus tesoros más valiosos y Purús, en el departamento de Ucayali, es una de las mejores regiones para encontrar experiencias auténticas en la Amazonía.
Desde la selva, la región ofrece una gran variedad de actividades, desde senderos de naturaleza, navegación por el río, visitas a las comunidades locales y la oportunidad de ver diversos animales silvestres. Pero sin duda, un punto clave durante cualquier viaje, es la comida.
Aquí en Purús, la comida es increíblemente variada y deliciosa, la mayoría de los lugares son pequeños, locales y muy económicos. Los restaurantes no siempre están señalados y no esperes encontrar menús escritos en inglés y con imágenes ilustrativas.
No te preocupes, aquí te mostramos una guía detallada para encontrar los mejores lugares para comer en la región:
1. La Picantería ‘Corazón de Jesus’: Este humilde local es bien conocido por sus platos clásicos de la selva como el juane y el tacacho. A diferencia de muchos otros lugares, aquí se hace todo de manera casera y con ingredientes recién comprados. Ellos ofrecen un menú fijo que cambia diariamente.
2. La Huerta de mi Padre: Ubicado en la plaza principal de Puerto Esperanza, La Huerta de mi Padre es uno de los mejores en la ciudad en términos de calidad y sabor. La comida es auténtica, saludable y deliciosa. Los platos más recomendables son el ceviche de paiche y la sopa de carne (con verduras de la huerta).
3. La Casita de Victoria: Es un muy buen lugar para aquellos que buscan comida local a un precio justo. Los platos aquí son simples y deliciosos, hechos con productos locales frescos. Entre ellos están el juane y la sopa de carne. El servicio es siempre cálido y acogedor.
4. Casanova: El menú aquí también cambia diariamente. La gente viene aquí por su fama de tener pescado fresco del día, servido con arroz y yuca cocida. También puedes probar el patacón y el cebiche. Es una buena opción si quieres una experiencia culinaria auténtica.
5. Pacayito: Este es uno de los lugares para comer que atrae a muchas personas de la ciudad. La comida aquí es esencialmente de la selva, con platos de carne escasa e ingredientes frescos. El juane, el tacacho y los plátanos maduros fritos son muy populares, pero aquí también puedes encontrar pescado fresco y comidas a base de pollo.
6. El Amazónico: Una de las opciones más únicas, El Amazónico ofrece una gran variedad de platos con ingredientes amazónicos. Los bocadillos servidos aquí con diferentes salsas son una explosión de sabor. Se puede optar por platos vegetarianos y veganos, siendo muy dignos de probar.
Consejos adicionales
Durante todo el año, se pueden encontrar muchos cultivos de aguaje, así que asegúrate de probar el batido de aguaje o comprar productos hechos con este fruto.
No olvides probar la chicha, una bebida de origen prehispánico, muy valorada por la cultura local. Es conocido por sus propiedades efervescentes debido a su proceso de fermentación.
Si tienes tiempo, no dudes en visitar alguna comunidad nativa, ellos con seguridad tendrán una gran variedad de platos y bebidas que no encontrarás fácilmente en otro lugar. Podrás disfrutar de tradicionales banquetes que ofrecen los habitantes de la zona en sus casas para mostrar su hospitalidad y compartir sus costumbres.
La nota acerca de Purús, Perú
Conocer Purús significa vivir una experiencia auténtica en la Selva Amazónica del Perú. El lugar cuenta con impresionantes atracciones turísticas, su rica biodiversidad, sus ríos y paisajes impresionantes. Y además, se encuentran restaurantes pequeños y humildes, donde se puede probar comida increíblemente deliciosa, auténtica y saludable. Los platos ofrecidos por los restaurantes de la región son una expresión de la riqueza cultural de la zona.
En resumen, es un lugar ideal para explorar y disfrutar de lo que la naturaleza y la culinaria tienen para ofrecer. Purús es una de esas joyas ocultas en el Perú que merece la pena visitar al menos una vez en la vida.