La Vall de Gallinera es un territorio en la provincia de Alicante que cuenta con una gastronomía excepcional. La riqueza de sus cultivos, la variedad de sus vegetales y la tradición de sus platos hacen de este lugar un destino perfecto para los amantes de la buena comida.
Si estás pensando en visitar la Vall de Gallinera, a continuación te dejamos algunos consejos sobre dónde comer y qué probar para que puedas disfrutar al máximo de su gastronomía:
1. La Carroza: este restaurante es todo un icono en Vall de Gallinera por sus famosas paellas y arroces. Además, su carta cuenta con recetas tradicionales como el cordero al horno o las habas con sepia. El ambiente es muy acogedor y la atención del personal es excelente.
2. Els Capellans: este es otro de los restaurantes más recomendados de la zona. Aquí puedes probar platos como las sardinas en salazón, la ensalada de tomate y mojama o el gazpacho de cerezas. Todos los ingredientes son locales y de temporada, lo que asegura una experiencia gastronómica auténtica.
3. Riu Rau: un lugar ideal para probar tapas y platos de picoteo. Destacan sus croquetas de boletus, las berenjenas fritas con miel o los calamares a la andaluza. Además, tienen una buena selección de vinos de la zona.
4. Fornet: una panadería que elabora su propio pan con harina de trigo y espelta ecológicos. Son famosos por su pan de centeno y por sus coques, que puedes degustar con diferentes toppings como la sobrasada o el queso de cabra.
5. La Fonda: este es un lugar con mucha solera en la Vall de Gallinera. Ofrecen una cocina clásica y tradicional, ideal para quienes buscan platos contundentes. Destacan el conejo al ajillo, las albóndigas caseras o el pollo al chilindrón.
Además de su gastronomía, la Vall de Gallinera ofrece muchas otras atracciones turísticas que no puedes perderte. Por ejemplo:
– Rutas de senderismo: hay varios senderos que recorren los paisajes naturales de la zona, como el PR-CV 147 o la ruta de les gorgues de la Vall de Gallinera. Son perfectas para disfrutar de la naturaleza.
– El castillo de Forna: una fortificación que data de la época árabe y que fue clave en la defensa de la zona durante la Guerra de la Independencia. Desde allí se pueden contemplar unas vistas impresionantes de la Vall de Gallinera.
– Museo Etnológico: un espacio que recoge la historia y las tradiciones de la Vall de Gallinera. Es una buena oportunidad para conocer más sobre su gastronomía, su artesanía y su forma de vida.
Si vas a visitar la Vall de Gallinera, te recomendamos que:
– Pruebes los licores artesanales de la zona, como el romero o la hierbabuena.
– Visites los mercados de los pueblos para comprar productos locales, como la miel, el aceite de oliva o los embutidos.
– Reserves con antelación en los restaurantes más populares, especialmente en época de verano o en fin de semana.
En resumen, la Vall de Gallinera es un territorio lleno de sabor y tradición que merece la pena descubrir. Desde sus restaurantes más emblemáticos hasta sus paisajes naturales, todo en este lugar es una invitación a disfrutar de la vida y de la buena comida. ¡No te lo pierdas!